4 Habilidades Sociales Imprescindibles.
Sonreír, Escuchar, Hablar Despacio y Preguntar
Para una buena comunicación interpersonal, la sonrisa es esencial, la escucha activa es imprescindible, hablar despacio es fundamental y preguntar en caso de duda es primordial.
Muchas veces nuestra falta de habilidades sociales nos puede limitar mucho a la hora de afrontar determinados retos en nuestras vidas: ya sea enfrentarnos a entrevistas, presentaciones, o a las simples interacciones sociales o profesionales que se nos presentan.
Una primera impresión, en esas situaciones, así como la imagen que damos puede suponer la diferencia entre una interacción exitosa o un completo fracaso.
Sí, es cierto que todos hemos pasado por momentos en los que hemos pensado, trágame tierra…una vez superado el trance, analizamos la situación y aprendemos de los errores o reacciones inadecuadas.
Sin embargo, lo que muy pocas veces no podemos ver es, precisamente, el aspecto físico y la impresión que causamos a los demás, desde fuera y tampoco apreciamos el tiempo tan valioso que hemos perdido por no saber ser habilidoso desde el primer momento.
La única forma de verlo sería grabarse en video y verse, yo al grabar mis videos de los cursos y de las conferencias (webinar) he tenido la oportunidad de verme grabada muchas veces y repetir luego editar. Os puedo asegurar, que una vez que te ves grabado, aprendes muchísimo sobre los errores que se pueden cometer.
En el artículo de hoy te voy a compartir algunos secretos que puedes utilizar para mejorar tus interacciones sociales.
- Hay que sonreír más
La sonrisa es una arma muy poderosa y a mí en concreto desde que me grabo en videos me gusta mucho más mi boca y sonreír, he descubierto que al pintarme los labios de rojo carmín, y sonreír me veo y siento favorecida, es mi opinión cada una sabrá qué color o que parte de su cara puede agradarle o trasmitir más y por lo tanto eso da seguridad y confianza en una misma. Obviamente, esto no quiere decir que siempre haya que estar con la sonrisa puesta y menos ante acontecimientos serios que así lo requieren, pero cuando vamos por la vida, lo mejor es ir con la cabeza bien alta y sonriendo.
La sonrisa ayuda a relajar la tensión en el ambiente y hace que nuestro interlocutor se muestre más receptivo a nuestro mensaje. Luego, ya habrá tiempo de cambiar de cara si el discurso o la situación lo merecen.
Grábate y práctica, se natural, regístralo como algo natural y sonríe al comunicar, no te creas que es una situación tonta o haces el tonto, si no agradable…¿que es lo peor que puede pasar?
Una webcam, o la cámara de un móvil o de una tablet te pueden ayudar.
- Escuchar
Vamos tan corriendo, aturullados en resolver los quehaceres diarios, que apenas dedicamos tiempo a lo que se escucha a nuestro alrededor ya sean sonidos armoniosos o ya sean ruidosos, y lo peor de todo es que hay personas que intentan comunicarse con nosotros y no les prestamos la atención adecuada, no les damos la importancia que se merecen y todo…
¿Para qué?
¿Es que al final del día nos va a dar un premio por llegar los primeros?
¿Los primeros a dónde?
La diferencia fundamental entre oír y escuchar está en la intención. Cuando escuchamos lo hacemos intencionadamente, mientras que cuando oímos lo hacemos independientemente de nuestra voluntad.
Pero las prisas, hacen que confundamos ambas perdiéndonos por el camino verdades absolutas o imágenes no verbales que tiene mucho que decir…pero que no sabemos percibir.
Por eso podemos oír sin querer y es imposible escuchar sin querer, porque cuando escuchamos lo hacemos con una intención, con un para qué.
Escuchar lleva emparejada la idea de finalidad y se realiza con intención y debe ser activa y una actitud frente a la vida.
Por primera vez, yo supe de ella cuando estudie mi certificación como coach, antes no sabía que existía y si lo sabía lo había olvidado con lo cual si la ponía en práctica o no, en mi día a día, no era consciente de ello, ahora SÍ….y me alegro, pues ahora retengo más información, escucho con más inteligencia y eso me permite incluso ver cosas que antes ni me fijaba, he crecido.
La escucha atenta y cuidadosa orienta nuestros circuitos neuronales hacia la conexión y nos sintoniza en la misma longitud de onda que nuestro interlocutor, aumentando así la probabilidad de conectar con él/ella y es la que se utiliza en la terapia Gestalt.
- Hay que hablar más despacio
Muchas veces hablamos deprisa, al estar asustadas o bien al sentirnos incómodas ante una situación y lo que pretendemos, es escapar. Terminar cuanto antes…
Por ello es muy importante, practicar y ser conscientes del momento y controlar la situación gestionando mejor el miedo o la vergüenza, y más si somos conferencistas, hay que dominar los silencios para saber manejar una presentación pues ello invita a la reflexión, a la participación intrapersonal y no al aburrimiento en aquellos momentos en los que nuestro discurso o mensaje así lo requiera.
Si queremos que nos escuchen y se interrelacionen con nosotras debemos cuidar el lenguaje y hablar más despacio, lo cual hace que hasta nosotras nos sintamos más comprometidas con el rol que nos toca.
- Hay que preguntar mucho más
Tras mi experiencia en mis estudios sobre todo universitarios, y comprobar con el tiempo que preguntar no debe cohibir, no hago más que decirles a mis hijos que ante cualquier duda, no se callen que la resuelvan en ese momento, lo más rápido que puedan, pues luego se acumulan en un saco roto, se olvidan y cuando llega la hora de la verdad, no sabemos dar respuestas, es decir…el ser introvertidos el no querer destacar influye mucho en la persona y en su destino. El dejar atrás estas creencias es fundamental a la hora de prepararse mejor en la vida, en la universidad, en el trabajo, pues esta habilidad de preguntar sin caer en la pesadez permite relacionarnos con los demás a la hora de alimentar nuestro conocimiento, muchas veces se confunde con el que pensarán de mí, o no me gusta ir detrás, pues no soy una pelotas.
El preguntar y resolver nuestra ignorancia momentánea permite avanzar más rápido y no frenarnos a la hora de superar obstáculos pero hay muchas personas que desde niños tiene miedo a levantar la mano por el que dirán.
La manera de dar la vuelta a esta situación es muy muy sencilla. Si es posible, investiga antes de preguntar pero si es necesario no te quedes ahí. Pregunta.
Ante una entrevista o en un taller o conferencia el secreto para hacer preguntas inteligentes, es disponer de información previa. Os puedo garantizar, que hacer este cambio de roles modifica radicalmente la receptividad del interlocutor y lo que es más importante nuestra imagen ante él y eso hace que nosotros nos sintamos mejor y logremos avanzar sin dificultad.
Cómo veis, no estoy hablando de habilidades imposibles de obtener. Hay que practicar y ser conscientes de los beneficios y las consecuencias de no haberlo hecho bien y sopesar el giro que dan nuestras interacciones y habilidades sociales. Ahora me gustaría preguntaros a vosotros, ¿qué otras habilidades importantes consideráis?
Si te ha gustado este artículo déjame tu opinión abajo, y no olvides apuntarte a mi boletín semanal gratuito para recibir todas las novedades directamente en tu correo. Pincha aquí.
Susi Nieto
Coach Profesional
Facilitadora en cambios de desarrollo personal, negocio y Vida.
Autoestima, voluntad, prioridades, orden, calidad de vida y mejora vital
Baena -Córdoba – España